
En un entorno incierto es muy difícil decidir.
Ya no están de moda los planes estratégicos y apostamos por #Lean y #Agile.
Oímos hablar constantemente de #transformación, #innovación, #digitalización, 4.0.
Nos dicen que tenemos que hacer. ¡Hay que gastar los fondos #NextGeneration!
Pero es muy complicado decidir sin un mínimo de información y una dirección hacia la que apuntar.
Hace poco escribía una serie de aportaciones para incorporar en estudios de FP. Resumo: proponía introducir la gestión de proyectos de forma ágil realizando un proyecto de innovación de base digital para practicar tres competencias:
- Ser capaz de entender como una tecnología puede afectar a mi vida, mi profesión y a mi organización o empresa. Hoy añado al planeta y al universo.
- Construir la capacidad de aprender a aprender.
- Saber cómo decidir.
Ninguna de estas tres competencias se practica en el sistema educativo reglado. Todas son muy importantes. Hoy prefiero escribir sobre #DECIDIR.
En mi anterior artículo “Einstein y la Fórmula de Dios” introducía la necesidad de abordar el futuro con una mirada distinta. Hoy también. Si somos capaces de usar nuevos criterios de decisión en las inversiones, proyectos, compras, viajes, ocio, … habrá futuro para la humanidad.
Recuerdo con nostalgia participar en los primeros tribunales del Programa Innova de la Universidad Politécnica de Cataluña con Paco Solé Parellada donde se presentaban planes de empresa allá por el año 2002. Aun guardo las plantillas de evaluación: ¿el producto es robusto? ¿hay suficientes clientes? ¿dispone de capacidad para comercializar? ¿genera suficientes beneficios? ¿puede encontrar financiación?¿incorpora la última tecnología?
A estas preguntas es urgente añadir otros criterios de impacto en nuestra vida y planeta:
¿aumenta la calidad de vida de los stakeholders?
¿genera cero residuos?
¿usa energía verde?
¿utiliza agua depurada?
¿mejora el planeta? ¿y el universo?
Empecemos a introducir NUEVOS criterios de compra a nivel individual y en todas las organizaciones. Apuesta por perfeccionar la toma de decisiones con CONCIENCIA PLANETARIA.