El porqué de este blog
En todos los países del mundo la educación es una de las prioridades de todos los gobiernos. Y una preocupación para la mayoría de padres y madres. Muchos expertos, y desde hace ya más de 10 años, coinciden que en el siglo XXI es necesaria una transformación profunda de la educación. Todos estos expertos afirman que la visión de futuro es una educación más personalizada y centrada en cada uno de los individuos (learner driven) y que la experiencia educativa de cada individuo debe interactuar con el entorno.
A mí personalmente me apasionan las teorías de estos expertos: las Inteligencias Múltiples de Gardner, la Inteligencia Exitosa (succesful intelligence) de Stenberg, El Elemento de Robinson o la Inteligencia Generadora y la Inteligencia Ejecutiva de Marina. Pero ya hace tiempo que ha llegado el momento de pasar de la teoría a la práctica.
Así que nuestro gran objetivo es conseguir que tanto en las escuelas, formación profesional, institutos, universidades, postgrados y empresas practicáramos la educación para la acción: la gestión de la innovación, la gestión por proyectos, la creatividad, la capacidad emprendedora,… más todo lo relacionado con la inteligencia emocional.
Todas estas prácticas confluyen en una única disciplina que llevo más de 15 años enseñando. Estas disciplinas tienen una metodología común a la que yo llamo: “espiral de inteligencia generadora e inteligencia ejecutiva (SIGIE)” o a la que también podríamos llamar “de las ideas a la acción” o “pasos para innovar”.
No es nuevo hablar de introducir la gestión de proyectos en la educación. Pero sí hacerlo de forma continua y en espiral. Mi propuesta es que a partir de primaria, cada año (de forma continua), los alumnos hagan proyectos individuales o en grupo que ellos mismos elijan y de forma que cada año, se amplíe la dificultad de los proyectos y la profundidad de los entregables (en espiral). El proceso de ir de las ideas a la acción son un conjunto de actividades que pueden aprender los maestros y entender todos los alumnos.
La clave para la transformación hacia una educación personalizada es descubrir los talentos individuales de cada niño, colocar a los estudiantes en un entorno en el que quieran aprender y les permita descubrir de forma natural sus verdaderas pasiones y entrenarlas con el método de las ideas a la acción.
Sencillamente fascinante, tu propuesta, soy de Guatemala, totalmente involucrada en la educación y en la lucha de las mejoras que deben de existir en muchos de los países de América Latina para mejorar el nivel de productividad y desarrollo no solo individual si no también a nivel país..